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Domingo

Hoy es ese séptimo día infernal de la semana, hoy es el día en que el diablo ataca sin piedad y Dios se me desaparece. Hoy la ira del mundo y de mi vientre me acaba, me arruina y me vuelve a dejar sola. De qué manera creer en las oportunidades, si cuando voy a optar por una, en seguida se me va, se me desaparece, se me muere la pequeña intensión, hoy solo puedo pensar en la muerte...

Cada cosa que late en el mundo, se hizo mi gran enemigo. Cada sentido, cada lugar, cada palabra de ti, es mi esperanza y a la vez es mi castigo. Hoy no hay nadie, hoy no existe la paz, hoy no veo, no oigo, no siento, no respiro.

¡Perdón, vida, perdón! ¿Qué más debo hacer?, siento que humanidad no queda, siento que dolor no vive, siento que sentir no da. Ya no puedo, ya no quiero.

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